La dura y violenta acción de la naturaleza dejó consecuencias. Familias fueron asistidas por el municipio, con apoyo del gobierno provincial. Nación hizo oídos sordos a los pedidos.
La tormenta de la madrugada del 17 de diciembre fue muy grave. En Gowland, Agote y Goldney su paso dejó más de 50 familias en situaciones difíciles que debieron ser asistidas por el Estado municipal, que contó con el apoyo del gobierno que conduce el gobernador Kicillof.
“Se hizo primero un relevamiento con la Secretaría de Desarrollo para establecer prioridades y se empezó a asistir a estas familias de la zona. Por suerte contamos con el apoyo y el envío de recursos del gobierno provincial; con Nación no pudimos contar porque no respondieron a nuestras solicitudes”, dijo la secretaria de Gobierno Clara Zunino, quien siguió de cerca el trabajo realizado en la zona.
Hubo muchas familias con voladuras de techos parcial o total, y también con otras necesidades como colchones, agua mineral, velas y hasta grupos electrógenos, como los que instalaron en la sede de la sociedad de fomento y en el comedor Negrito Manuel en Agote. Esto fue fundamental para los vecinos de Gowland, Agote y Goldney, ya que se esta manera podían cargar celulares para poder comunicarse y recibir ayuda.
“Quiero destacar el trabajo que hicieron todas las áreas municipales, ya que trabajadores y funcionarios estuvieron 24 horas trabajando a destajo. Y también vecinos comunes que donaban y ayudaban utilizando sus herramientas e integrantes de la sociedad de fomento de Gowland y Agote que trabajaron a destajo para brindarle soluciones a la gente afectada por el temporal”, destacó Zunino.
Los trabajos municipales también se vieron en la liberación de calles anegadas por la caída de árboles y en la posibilidad de llegar a ciertos hogares done el barro complicaba las acciones. Además, trabajaron en consonancia con Eden y la Cooperativa Levin para ir liberando zonas para la vuelta del servicio eléctrico.