Un joven de 19 años sufrió una salvaje golpiza a la salida de un boliche en la localidad bonaerense de Lezica y Torrezuri, partido de Luján.
El lamentable episodio, que tuvo lugar el sábado en el boliche CCP durante la llamada “Quinto.Fest”, terminó con César Ruiz Díaz internado con fractura de mandíbula y pérdida de piezas dentarias.
En tanto, Camila Aguirre, hermana de la víctima, contó a medios locales que el joven fue a la fiesta con su primo de 16 años. Cuando decidieron irse, el chico más joven se acercó al guardarropa a buscar su campera y uno de los encargados de seguridad le dijo que la habían perdido y lo empujó.
“Fue ahí donde le metió dos piñas, en eso mi hermano que lo estaba esperando afuera se acerca para ver qué pasó y sale esta rata inmunda y le pega a mi hermano dejándolo inconsciente, ya que se pegó la cabeza contra del cordón”, relató Aguirre a Luján Hoy
“Le bajaron todos los dientes, tiene fractura de mandíbula y tienen que colocarle clavos”, añadió la joven, sobre el cuadro de salud que atraviesa su hermano.
Ruiz Díaz continúa internado en el Hospital Zonal Nuestra Señora de Luján, por las graves heridas que presenta, causadas por las patadas, y puñetazos recibidos, y por le golpe que se dio al caer al piso.
El presunto atacante, Sergio Ulloa, de 30 años, fue detenido por el delito de lesiones graves, que prevé una pena de tres a seis años de prisión según establece el Código Penal.
Paliza de rugbiers en Zárate
El fin de semana pasado se conoció otro hecho lamentable, en la localidad de Zárate, donde en el marco de los festejos por el Día del Amigo un joven también de 19 años fue golpeado por un grupo de rugbiers, incluso cuando cayó al piso, episodio que conmueve por las similitudes con el crimen de Fernando Báez Sosa.
El ataque en banda contra el adolescente ocurrió en el Club Náutico Arsenal de Zárate. Natalia, la madre de la víctima, recordó el asesinato de Fernando en Villa Gesell, ya que los jóvenes que lo mataron en 2020, hoy presos, también son rugbiers oriundos de Zárate. “Hoy me pudo haber tocado a mí ser la mamá de Fernando Báez Sosa. Hoy le tocó a mi hijo pasar una situación de violencia por personas que representan un deporte (rugby) y del cual ya vimos 4 años atrás la trágica muerte de Fernando”, relató la madre del joven. Y agregó: “Por suerte, hoy puedo decir que mi hijo no sufrió lesiones graves porque también hubo mucha gente a su alrededor que pudo frenar tal golpiza”.
Gracias a la rápida intervención de quienes estaban en el lugar y trataron de calmar los ánimos, el joven fue puesto a resguardo hasta que llegó el servicio de emergencia. Luego fue trasladado a un centro de salud cercano y, al realizarle una tomografía, se confirmó que no había sufrido lesiones graves. Sólo resultó con dos puntos de sutura en el labio. (DIB)