Luego de la denuncia hecha por la víctima hubo testigos que refirieron ante la justicia que la vieron salir de la oficina en donde el sujeto cometió el abuso. El alcalde penitenciario fue detenido en su casa de Mercedes cuando regresaba de su jornada laboral.
El hecho es escalofriante y genera un fuerte movimiento en el Sistema Penitenciario. Detuvieron en su casa de Mercedes a un alcalde penitenciario acusado de haber violado a una mujer privada de su libertad en el interior de la Unidad Carcelaria 59 de Merlo. El acusado quedó a disposición de la justicia.
Siempre según la denuncia realizada por la víctima, una joven que cumple condenas por robo, todo sucedió en dos fechas diferentes. La primera fue en julio pasado, en circunstancias en las que ella se encontraba trasladando mesas y sillas de la escuela que funciona en el complejo carcelario.
Fue en ese entonces que el imputado y ahora detenido, la introdujo “violentamente en el baño, en donde abusó sexualmente” de ella mediante tocamientos en sus partes íntimas.
Posteriormente, pese a que la mujer no denunció ese hecho inicial, ocurrió un segundo abuso, ahora con acceso carnal. Su relato fue “contundente”, precisaron las fuentes consultadas por este medio. La chica, cumpliendo funciones de tutora educacional de otros internos, fue convocada por el acusado a una oficina.
Fue allí que se concretó la violación: Barraza “cerró la puerta violentamente, la tomó de los brazos” para luego someterla sexualmente mientras le tapaba la boca para que la víctima no pida ayuda.
La rápida respuesta institucional y la detención
El caso fue expuesto por la víctima ante las autoridades del complejo penitenciario, que rápidamente le brindaron contención e instrumentaron los mecanismos para que la mujer pueda realizar la denuncia correspondiente.
En rigor, fueron la directora y la celadora de esa unidad las que realizaron la presentación, tal como es su obligación. “Funcionaron las primeras barreras de alerta ante delitos en los que se entremezclan la violencia institucional y de género”, reflexionó una fuente de la investigación.
El caso recayó en el fiscal Claudio Oviedo, de la Fiscalía Nº 5 de Morón, que estaba de turno al momento de ocurrido el segundo hecho. Luego de tomarle declaración a la mujer y de convocar a la Fiscalía de Violencia Institucional, a cargo de Juan Cruz Bamonte, el funcionario solicitó la detención del acusado.
El relato de la joven fue constatado en detalle por los funcionarios judiciales que realizaron una inspección en el complejo, en donde además recopilaron el testimonio de dos testigos que vieron salir llorando a la víctima de la oficina en la que denunció haber sido sometida en un caso en el que, además, quedó configurado otro delito: el abuso de poder de un penitenciario sobre una persona privada de su libertad.
Barraza quedó detenido acusado de los delitos de abuso sexual agravado por ser cometido por personal de seguridad en ocasión de estar cumpliendo funciones y abuso sexual con acceso carnal agravado por ser cometido por personal de seguridad en ocasión del cumplimiento de sus funciones.
En la noche del martes, personal de la DDI Morón lo interceptó cuando llegaba a su casa y le comunicó los cargos en su contra, ante lo cual el penitenciario no opuso resistencia y se entregó. La orden para su detención había sido emanada por la jueza Karina De Lucca, a cargo del Juzgado de Garantías Nº 6 de Morón.
Fuente y foto: Primer Plano Online