Una familia de San Andrés de Giles fue atada, privada de la libertad, amenazada Y golpeada por delincuentes que entraron a robarle a su casa.
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El viernes pasado, alrededor de las 22 horas, cuando una familia de San Andrés de Giles se encontraba en medio de la cena, vio alterada su tranquilidad ante la irrupción en su domicilio por cinco hombre armados.
El hecho, se produjo en la calle 50 bis a 100 metros de la colectora nueva del acceso la autovía 7. Vivienda de la familia de Camila Ballesteros y Ariel Chiavarino, que sufrió una verdadera pesadilla: fueron atados, golpeados, les revolvieron todo y hasta amenazaron a sus pequeños hijos durante más de 45 minutos.
Fuentes policiales informaron que los delincuentes robaron electrodomésticos y un vehículo perteneciente a la mujer, que finalmente dejen abandonado en el km 77 de la autovía. Es la tercera vez que le roban desde que viven allí, pero esta vez fue la más violenta. La familia reclama más iluminación y cámaras, ya que no hay ninguna en esa zona.
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En sus redes sociales Mila Ballesteros conto el hecho “Así nos dejaron la casa anoche después de entrarnos a robar 5 hombres armados (4 pistolas y 1 escopeta).
Entraron a las 22 hs y estuvieron 45 minutos. Nos ataron, a mi marido Ariel Chiavarino y lo tiraron al piso tapándolo con una sábana, a mi hija de 6 años en dos oportunidades pies y manos y a mi pies, manos y la boca. A la nena de 1 año solo le sacaron los aros de oro y a mi bebe de meses en dos oportunidades lo tuvieron a upa. Mi marido terminó con puntos en la cabeza por los golpes y en observación internado hasta el día de hoy. A la nena de 6 años la llevaron a su pieza separándola de nosotros para pedirle los ahorros y que le cuente en donde teníamos plata. El 3 de diciembre nos habían entrado a robar, pero tuvimos la suerte de no haber estado en casa, aunque sospechamos que se fueron cuando llegamos. El año anterior también nos robaron alambrados, ladrillos, materias de construcción. En todas las oportunidades hicimos la denuncia y pedimos cámaras a la municipalidad y luminarias.»
en la mañana de hoy, Camila fue entrevistada en Fm Libre de San Andrés de Giles y contó algunos detalles más de la triste situación que les tocó vivir el fin de semana: “Nos amenazaron todo el tiempo con que nos iban a separar, cortar los dedos. Mi bebé de meses estaba durmiendo, en un momento se despierta y lo agarró uno con la misma mano que tenía la escopeta”.
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Les pedían dinero constantemente, aunque la familia les explicó que no tenían efectivo en su casa. Se terminaron llevando televisores, dos notebooks, perfumes, artículos de la peluquería que funciona allí, ropa y hasta la coca y el fernet que estaban tomando durante la cena. Huyeron en un auto de la familia y lo dejaron abandonado en la estación de servicio abandonada pasando el peaje de Villa Espil.
